Vida Abundante Uruguay - Martes 8 de Marzo 2022
Edificando mi vida sobre fundamento sólido.
Por: María Eugenia Marichal
Habacuc 3:19 (NTV) ¨¡El Señor Soberano es mi fuerza! Él me da pie firme como el venado, capaz de pelear sobre las alturas¨.
Finalmente Habacuc vuelve su mirada a Dios, deja la queja, recuerda con gratitud todo lo que Dios hizo en el pasado y termina esperanzado. Pasa de, ¨¿Hasta cuándo debo pedir ayuda, oh Señor?¨ a una afirmación del carácter de Dios, Su Soberanía.
Jesús en Mateo 7:26-27d (NVI) dice lo siguiente; ¨Pero todo el que me oye estas palabras y no las pone en práctica es como un hombre insensato que construyó su casa sobre la arena… esta se derrumbó y grande fue su ruina¨
Habacuc llegó a entender que su seguridad y su fuerza debían estar firmes en el constructor y que los pilares de una casa no pueden nunca afirmarse en un suelo movedizo. En otras palabras, entendió que el suelo debe ser la Roca firme e inamovible que es Cristo (1 Corintios 10:4) y los pilares Su palabra, Su Verdad.
¿Cuáles son esos pilares?
1. Jesús es el centro.
Mencionamos nuevamente el texto de Habacuc 2:4 ¨… pero el justo vivirá por fe¨.
A diferencia de lo que algunas personas creen, hay una sola forma verdadera de vivir por fe, o basados en una fe real, esa forma y/o base es Jesús. Justos delante de Dios y justificados, ¿basado en qué? En lo que Jesús hizo en la cruz, aceptando como fuente inerrante las Escrituras, las Buenas Noticias como el único recurso poderoso para los que están perdidos y el cuerpo de Jesús (la iglesia) como baluarte de la verdad.
2. Dios no cambia, Su amor tampoco.
Todo puede cambiar pero el que creó todas las cosas que vemos y las que no vemos permanece inmutable. Y si Dios no cambia, tampoco cambia su amor porque El es amor, ¡EL ES!
3. Sus propósitos se cumplen.
La adversidad no lo sorprende a Dios, por lo contrario, es una plataforma para mostrar cuán grande es. Núm. 23:19 …¨¿Acaso alguna vez habló sin actuar? ¿Alguna vez prometió sin cumplir?¨. El es fiel y siempre lo será.
4) Esperanza libre de dolor y sufrimiento.
La cruz marca nuestro presente y nuestro futuro. Implica que Jesús volverá y la tierra será llena del conocimiento de Su gloria.
Te estamos esperando Jesús, ¡VEN!