Vida Abundante Uruguay - Martes 5 de Abril 2022
Cultura de oración.
Por: María Eugenia Marichal
¨Te suplico que me prestes atención, que fijes tus ojos en este siervo tuyo que día y noche ora en favor de tu pueblo Israel¨. Nehemías. 1:6 (NVI)
Si tuviéramos que calificar nuestro tiempo a solas con Dios, ese tiempo donde llevamos todo ante Él, ¿qué calificación nos pondríamos? Basta con mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de que el cielo no impacta a la tierra por causa de nuestra poca conversación con nuestro Padre. ¿Qué nos distancia del trono? La única distancia que tenemos entre la tierra y el cielo, es la oración que no hacemos. Jesús ya pagó el precio, todo lo que no podíamos hacer fue hecho por Él, por medio de El fuimos reconciliados y restaurados con Dios Padre. Ahora es tiempo de abrazar la gracia a través de la oración, que no es otra cosa que dependencia total y plena del Padre.
Reflexionemos en la oración de Nehemías
1) Dios conoce nuestra necesidad pero nosotros a veces no pedimos como debemos.
Nehemías sabía dos cosas, y entendía lo siguiente; que el éxito que pudiera tener ante el rey Artajerjes y el favor delante de él dependía exclusivamente del Rey del universo. Por lo tanto, su oración fue precisa y consistente.
Nehemías 1:11d (NVI) ¨y te pido que a este siervo le concedas tener éxito y ganarse el favor del rey¨
2) Dios, el sustento, proveedor de todo recurso, fuente inagotable.
Nehemías 2:8 (NVI) ¨El rey accedió a mi petición porque Dios estaba actuando a mi favor.¨
La oración es el método y la herramienta que tenemos para acceder no solo al trono sino para que Dios nos provea de todo lo que necesitamos.
Santiago 5:16 (NVI) ¨La oración del justo es poderosa y eficaz¨.
3) Buscar a Dios en oración.
El orar trae consigo lo siguiente, nos enseña a esperar la respuesta de Dios y mientras esperamos se desarrolla la paciencia y la confianza en Él. Pablo en Fil. 4: 6-7 dice ¨No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios…¨ Orar y descansar en Dios trae paz a nuestro corazón.
Charles Spurgeon dice lo siguiente: ¨Si Dios no tuviera la intención de escucharnos, no nos pediría que oráramos¨.
¡Oremos, nuestro Padre nos escucha!